A lo largo del día, nuestro cerebro recibe una gran cantidad de impactos de información. Nuestra mente corre a gran velocidad y los pensamientos negativos aparecen con más frecuencia y se repiten una y otra vez. El cuerpo nos envía señales cuando estamos sobre estimulados y experimentamos sensaciones como ritmo cardíaco acelerado, manos sudorosas y generamos, automáticamente, pensamientos negativos. Existen diversas razones por las que la relajación nos resulta difícil. El primer paso hacia la relajación es comprenderse uno mismo y averiguar qué nos está pasando.

Hoy te contaremos algunas técnicas que sirven para que esta temporada de vacaciones consigas relajarte.

Aprender cómo funcionan el estrés y la ansiedad puede ser de utilidad cuando tratamos de averiguar cómo nos sentimos, por lo que en este caso busca ayuda, consulta con un psicoterapeuta o médico.

¿Qué hacer cuando no puedes relajarte?

Puedes beneficiarte de algunas técnicas de manejo del estrés respaldadas con evidencias científicas cuando necesites relajarte, te dejamos algunos consejos:

Relajación muscular progresiva

La relajación muscular progresiva es un método en el que se contraen y se relajan los músculos mientras escaneas tu cuerpo y respiras profundamente. Acuéstate en una posición cómoda y comienza a escanear tu cuerpo, presta atención a que parte de tu cuerpo le cuesta más relajarse.

Psicoeducación

El conocimiento es uno de los métodos más efectivos para lidiar con el estrés y puede ser el primer paso para trabajar en uno mismo. Lee información acerca del estrés, recopilando datos generales sobre cómo funcionan el estrés y la ansiedad.

Habla con alguien

Procesarlo en voz alta y externarlo con otra persona nos permite nombrar nuestros sentimientos y hablar sobre nuestras necesidades. Comparte tus sentimientos. Nuestro cuerpo y nuestra mente están íntimamente conectados. A veces necesitamos relajar nuestro cuerpo para poder relajar nuestra mente.

Mueve tu cuerpo. Baila al ritmo de tus canciones favoritas. Libera tus tensiones.

La meditación relajante

Un estudio demostró que la meditación es más eficaz que la relajación muscular progresiva cuando se trata de reducir los síntomas del estrés producido por el exceso de trabajo. Además, permite que tu cuerpo libere la tensión a través de diferentes técnicas de respiración que puedes implementar en tu práctica de meditación.

Los pasos de la técnica básicamente son

Siéntate en silencio y concéntrate en tu respiración. Piensa en todo el universo, en el comienzo de la vida y, de nuevo, date cuenta de la gran cantidad de cosas que no sabes sobre la existencia. Trata de abordar cualquier conflicto o situación estresante con esta mentalidad. Esta mentalidad nos ayuda a no pensar demasiado, aceptando la incertidumbre como parte de la vida.

A veces vivimos en el «¿Por qué?» ante cualquier incertidumbre. La mente humana no siempre es amiga de lo desconocido. Así como nos calma saber algunas cosas, nos dará calma también aceptar que no sabemos muchas otras y nuestra mente descansará.

La Biorretroalimentación

La idea es notar las reacciones que experimentamos en el cuerpo ante ciertos estímulos y conocerlas con el fin de generar una sensación de control sobre ellas y de esa manera ayudar a controlar el dolor y propiciar la relajación. Recuerda que siempre tienes la opción de detenerte si no te sientes bien al hacerlo y asegúrate de buscar ayuda profesional si lo requieres.

Solicita ayuda profesional

Puedes consultar a un terapeuta si te resulta especialmente difícil relajarte. La reducción del estrés basada en la atención plena es una meditación clínicamente estandarizada y se ha descubierto que también es muy eficaz para mejorar la salud mental y reducir el estrés. Puede haber otras razones más profundas que te hagan experimentar angustia, ansiedad o estrés.

Practica la autocompasión

Si sientes que lo necesitas, trata de darte un espacio para relajarte, sin ocuparte de nada más que de ti. Después de superar este complicado primer periodo, será más fácil reconocer y aceptar tus emociones difíciles. Una vez que estés listo, puedes observar tu mente y cómo te sientes en el momento presente. Lograrás ver lo que está detonando esos sentimientos después de relajar tu cuerpo.