5 de junio, Día Mundial del Medioambiente. Es un buen momento para recordar prácticas tan sencillas como reciclar, por nuestro entorno, por el planeta, por nuestro mar y por nosotros y el futuro #reciclemos y cuidemos el mundo.

Pasión por nuestro entorno, pasión por ti

Evitar el derroche de alimentos

Unos 180 kilos de alimentos en buen estado se desperdician por persona al año. Y hasta el 50% de los productos aptos para el consumo que se desechan se convierten en residuos a lo largo de la cadena alimentaria, según fuentes europeas. Evitar, o al menos reducir, en lo posible el derroche de alimentos disminuye el impacto ambiental y, de paso, se ahorra dinero. 

Todos podemos conseguirlo con estos tips: organizar bien las compras, guardar en la nevera y el congelador los diferentes alimentos o no desechar alimentos por su aspecto aun cuando estén en buen estado.

Usar el transporte público, bicicleta o a pie

Uno de los principales causantes de la contaminación del aire urbano, es el uso del coche privado.

Siempre que se pueda es mejor utilizar el transporte público, la bicicleta para el día a día, cómo hacer ejercicio o para ir a trabajar, o ir caminando.

De esta manera, mejoraremos el medio ambiente, nuestra salud, el planeta, nuestro bolsillo, razones suficientes para ponerlo en práctica.

Hacer la compra con consciencia

Hoy en día disponemos de bastante información sobre la gran variedad de productos y servicios a su alcance. Comparar e informarnos sobre cuáles tienen un impacto inferior ambiental.

En el hogar podemos realizar estás prácticas

En casa la humedad se puede producir por: la zona donde vivimos, por cocinar, secar la ropa, hasta toser. 

Este vapor debe salir fuera de la vivienda porque si no se acumula y condensa en muros, techos y vidrios. Y la casa se humedece, deteriora y produce focos insalubres en su interior. Por eso debemos tratar de tender la ropa fuera de casa, utilizar siempre que cocinemos la campana o tragahumos y abrir bien las ventanas, ventilar  etc.

También es importante mantener una temperatura adecuada y constante en casa. Así lograremos tres beneficios importantes: mantener el confort en nuestro hogar, reducir las emisiones de CO2 a la atmósfera y ahorrar en nuestra factura energética.

Es importante graduar el termostato

En el caso de disponer de calefacción hay que graduar el termostato con una temperatura de 20º y 22º. Con esta temperatura podrás estar a gusto. Por cada grado añadido, el consumo de calefacción aumenta entre un 6 y un 8%

Nada de dejar el televisor en Stand by

Esta función te permite apagarlo con el control remoto, ya que no sólo le produce un desgaste al equipo sino que además consume energía innecesariamente. Encenderlo sólo cuando vaya a ser utilizado (se ha comprobado que el 40% del tiempo en que la tele está encendida no se está viendo).